LOS BUFFALO BILLS LANZADOS

 

Rambo volando hacia el TD (AP Photo/Rick Scuteri)


Plácido partido que dominamos con contundencia desde el principio al fin, siendo el partido más cómodo de la temporada junto con el de los Seahawks.

Ya sabíamos de la debilidad ofensiva de los 49ers y nuestra excelsa defensa la controló sin problemas, sin embargo, la defensa de los 49ers es una gran unidad y contra ella ejecutamos una tremenda performance digna de enmarcar. Sin lugar a dudas fue el mejor partido de la ofensiva del año teniendo en cuenta quién teníamos delante.

 

ATAQUE

 

Anotamos en seis drives consecutivos, tan solo no anotando en el primer y último drive, y si no lo hicimos también el primero fue porque Diosh erró un pase muy sencillo a un Cemento totalmente desmarcado. Pero lo impresionante es que llegamos a la zona roja en seis de los ocho drives, incluyendo el último drive la primera parte, en el que nos cruzamos el campo entero con solo 1:18 en el reloj, no anotando TD por falta de tiempo. La secuencia fue: 0-7-7-3-7-3-7-0.

Por segundo partido consecutivo fue un ataque perfectamente balanceado con un playcall perfecto de LaB🎱la, pero esta vez sin autotiros en los pies. Y de nuevo se cumplió mi máxima de nuevo que no falla: más de 20 acarreos = victoria. Esta vez fueron 21 acarreos, 18 para Motor para 61 yardas y 3 más para Moss para 9 yardas. Además, Motor recibió 4 screen-targets, de las cuales atrapó 3 para sumar 22 yardas.

La línea ofensiva estuvo muy bien. Empezó con Winters en el RG y Mongo Feliciano en el LG, pero pronto pasó Mongo al RG y Boettger se ocupó del LG. Esta es la línea que mejor rinde sin lugar a dudas, y es una pena que el señor Bobby Johnson no se diera cuanta hasta empezado el partido, pero claro, como el adicto enfermizo a las rotaciones que es, si no rota el tío no se queda tranquilo.

Y más cómodo que nunca, Diosh hizo lo que le dio la santa gana, completando 32 pases de 40 lanzados (80%), yéndose a las 375 yardas (su tercera mejor marca de siempre), con 4 TDs y #0 INTs, convirtiéndose con esta magistral actuación en el primer QB en la historia de los Bills con un 80% de pases completados y 4 TDs. Además, sus cuatro partidos en la presente campaña de más de 300 yardas (en dos de ellos más de 400 yardas) y al menos 3 TDs (en dos de ellos 4 TDs) se convierten en la mayor cantidad de ese tipo en la historia de los Bills, superando a Drew Bledsoe en el 2002 y a Jim Kelly en 1991.

Nuestros receptores tuvieron todos ellos un gran partido. El Arcángel Gabriel como número #2 se fue con 3 recepciones sobre 4 targets para 68 yardas y de nuevo un TD. Diggs y sus manos de oro se fue con 10 recepciones sobre 11 targets para 92 yardas. McKenzie también aportó con dos recepciones sobre dos targets y un TD.

Seguro de Vida certificando la recepción (AP Photo/Rick Scuteri)

Mención aparte se merece Seguro de Vida. Antes del partido dije que era el día perfecto para que se pusiera las botas, pues los dos principales nickelbacks de los 49ers, Jamar Taylor y K’Waun Williams, no iban a estar, y efectivamente fue su paraíso personal con 9 recepciones sobre 11 targets para 130 yardas y un TD. Y sus 797 yardas globales en lo que va de año ya superan, a falta de cuatro partidos, las 778 del año pasado, y está a tan solo 36 yardas de las 833 de su récord personal conseguido en los Cowboys en 2016, yendo encaminado a conseguir por primera vez en su carrera las 1000 yardas. Pero eso no es todo, pues con su TD frente a los 49ers, se convierte en el jugador de 5’8’’ o menos con más TDs de toda la historia de la NFL.

Rambo también se apuntó a la fiesta. Se dejó los drops en casa y se trajo de nuevo las rambadas, yéndose con una perfecta tarjeta de 4 recepciones sobre 4 targets para 27 yardas y un espectacular y acrobático TD.

Y otro que se dejó algo en casa fue el Sargento, pues se olvidó el cagadero. Esta vez no fue Sargento Cagón, y sí Sargento Valentón, ya que se jugó tres cuartos downs, dos muy obvios en la zona roja, pero un tercero en la mitad del campo de los 49ers en el que le echó huevos, sin duda provocado por la confianza que Diosh y sus muchachos le transmiten.

 

DEFENSA

 

La defensa sigue tremenda, contundente y provocando turnovers. Y hablando de Tremendo, anuncio que a Tremendo Edmunds le cambio el apodo, llamándose a partir de ahora el Búfalo Edmunds. BRUTAL su stop del enemigo en la yarda uno.

Micah-Mito-Hyde celebrando con sus compis su intercepción (AP Photo/Ross D. Franklin)


Otro que estuvo tremendo fue Micah-Mito-Hyde (nuevo apodo también), con su intercepción y el no menos BRUTAL tackle en la línea de gol que impidió el TD de los 49ers y fue el inició de asesinato de su drive.

Y claro, si hablamos de tremendos, no puede faltar Tremendous White con su tercera intercepciones en los últimos cuatro partidos.

Y como no hay dos sin tres, un tercer nuevo apodo sale a la palestra, aunque en este caso, para variar, en negativo como el único suspenso del partido: Cazamariposas Wallace, pues tanto en el primer TD de los 49ers, como en la espectacular recepción de Aiyuk de tropecientas yardas, estaba, precisamente, cazando mariposas. Sinceramente, no entiendo qué hace Dane Jackson en la escuadra de prácticas, cuando en los dos partidos que ha afrontado como titular lo ha hecho fenomenal.

 

EQUIPOS ESPECIALES

 

¿Quién es Bojorquez? La respuesta tardó en ser contestada 56 minutos y 16 segundos, pues su primer y único punt fue a falta de 3:44 para que acabara el encuentro. Y se notó que andaba con ganas de patear al fin, ya que fue una bomba de 68 yardas aéreas.

BA$$UKA a lo suyo. Con las los 2 FGs y los 4 XPs de ayer ya lleva 21 pateadas a palos consecutivas transformadas (9 FGs y 12 XPs).



PRÓXIMA PARADA

La segunda derrota consecutiva de los Steelers.



Sejirō せひろー
@LOS_BBSS

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